LA GENTE DE MI CALI
Lectura denotativa
Presento una imagen en primer plano de un señor mayor de raza negra
con bigote, gafas y sombrero ubicado en una calle de ciudad, delante de él
hacia su derecha un micrófono. Tras él se encuentra una batería y un señor con
gorra, atrás de éste una bandera de Colombia. Más atrás un señor
transportando canastas de gaseosa y personas paradas y caminando.
Lectura connotativa
Encontramos en la ciudad de Cali un personaje talentoso, que a
pesar de sus años despliega una gran energía y vitalidad. Baila, canta, toca la
batería, se ríe constantemente e invita a la gente que sonría con el, además es
bulloso y hasta escandaloso. Es el fiel representante del ser caleño. Porque en
Cali somos alegres, rumberos, calidosos, simpáticos, llenos de
gracia y, de vez en cuando, se nos corre el champú. Este personaje parece
venido de otro planeta, de unos trastes hace los instrumentos musicales que lo
acompaña en sus cantatas y con material de desecho la carrosa en la que transporta
toda la parafernalia que usa para sus shows. Es que los caleños somos
incomparables, una carga colorida de encantos que contagiamos el ambiente más
falto de croma y sabor.
Reflexión
Esta es la gente que necesitamos en Colombia, gente vivaz llena de
esperanza que mira la vida con optimismo, con oportunidades. Gente recursiva,
que de poco logra lo más significativo, lo indispensable…el estar contento.
Contento por lo que se tiene, por lo que se vive, por lo que se disfruta.
Contento con la gente a pesar de la indiferencia de esta pero algo le quedará al que lo
ve, al que lo escucha, al que lo lee porque por un instante nos ha hecho
olvidar los problemas y sin darnos cuenta terminamos tarareando con el la salsa
de nuestra Cali bella. Gracias Teo Rumba por ser una parte de lo bueno de nuestra
ciudad.
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